Después de la detención del empresario futbolístico Minor Vargas el pasado mes de enero, hay una confusión, ya que no se sabe si detuvieron al empresario o bien al fútbol nacional de Costa Rica.
Al empresario se le detuvo en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York, en su calidad de presidente de la compañía Provident Capital Indemnity y la cuál esta involucrada en un fraude por $670 millones.
La crisis que ha causado en dos equipos de la primera división, a nivel económico y deportivo hace que el campeonato pierda vistosidad y se llene de problemas administrativos que se llevan al campo de juego aunque en las declaraciones se diga lo contrario y al final protagonizan malos espectáculos deportivos.
Ejemplo claro son los equipos de Barrio México y Brujas pasan por una situación económica difícil, llegando hasta el punto de que el equipo canela paró los entrenamientos esta semana debido a la falta de pago de la primera quincena de enero y aún así deben jugar el fin de semana claro esta sin un ritmo vistoso y saliendo goleado hasta en su propia casa, algo que sin duda debe preocupar.
Pero el problema no solo se ve reflejado en la primera división. Si nos vamos a observar la segunda división la situación no es tan caótica pero si preocupa algunos dirigentes, equipos y futbolistas que veían en Vargas la oportunidad de poder surgir.
Con toda esta confusión que se ha visto muchos se preguntan que pasará ahora con el fútbol en Costa Rica, a donde vamos con estos problemas que nos desaniman como aficionados a ese deporte.
El fútbol nacional pierde cada vez más y más protagonismo que puede llegar a tocar fondo y conste que esta muy cerca.
Problemas como el pobre rendimiento de los equipos en el torneo, poca asistencia de los aficionados a los recintos deportivos, malos arbitrajes y falta de compromiso de los jugadores podrían llevar a la tumba a más de una institución como es el caso de Brujas o Barrio México que son por el momento los que más están sufriendo.
Sumado a todo esto la poca atracción en la forma de jugar el torneo agrava aún más el problema.
Con estos problemas ya citados nuestro fútbol parece que se encuentra encerrado entre rejas de donde por el momento habrá que esperar a que los dirigentes pongan todo en orden y puedan sacar del gran lío en el cuál se encuentra el Futbol Nacional.
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